El servicio de distribución final es el suministro de energía eléctrica que se presta a la población mediante redes de distribución, en condiciones de calidad de servicio y precios aprobados por la CNEE. La calidad se regula por lo estipulado en las Normas Técnicas del Servicio de Distribución.

Es la supervisión de la calidad del servicio comercial. La norma define indicadores que miden la calidad de la gestión comercial de las distribuidoras, para establecer acciones de mejora en la atención al usuario. La relación cliente – distribuidora debe darse en condiciones apegadas a lo establecido en la norma y para ello los principales indicadores de calidad establecidos regulan los aspectos de gestión de reclamos y solicitudes de los usuarios, facturación y calidad de la medición del consumo.

La calidad del producto técnico se relaciona con la estabilidad del suministro brindado al usuario final (nivel de voltaje, calidad de la onda eléctrica, factor de potencia). Dicha estabilidad es fundamental para que la energía que llega al usuario pueda ser utilizable en el hogar, comercio o industria. Cualquier perturbación en la calidad de la energía puede afectar el funcionamiento de los equipos eléctricos y también reducir la eficiencia en el desempeño de las redes de distribución y transmisión. La CNEE verifica el cumplimiento de los niveles de calidad de los parámetros de producto técnico.

Los indicadores de calidad de servicio técnico evalúan la continuidad del servicio de energía eléctrica que la distribuidora brinda a los usuarios, midiendo parámetros de frecuencia y duración de las fallas o interrupciones del servicio en distribución tanto a nivel global de las redes (índices globales) como a nivel de afectación al usuario (indicadores individuales). En las redes de transmisión se evalúan la ocurrencia de indisponibilidades de las redes de transmisión, distinguiendo entre indisponibilidades forzadas y programadas (incidencias o mantenimientos respectivamente)

El sistema de transporte es el conjunto de subestaciones de transformación y líneas de transmisión, entre el punto de entrega del generador y el punto de recepción de la distribuidora o de los grandes usuarios y comprende un sistema principal y los sistemas secundarios.